Podría parecer que Thanksgiving es una fiesta en la que todo el mundo come turkey (pavo), y muchas cosas que acompañan al pobre pavo, como patatas hervidas, crema de espinacas, revuelto de pan con legumbres y mermelada de frutos rojos. Y que se acaba con unos postres también suculentos, como tarta de nueces, tarta de frutos secos, brownies y pastel de manzana, regado con helado de distintos sabores.
Y así es. Thanksgiving es eso.
Podría parecer que Thanksgiving es una conmemoración de la historia de los primeros Pilgrims que poblaron Massachusetts. Aquellos 102 Pilgrims que surcaron el Atlántico a bordo del Mayflower y que después de un viaje horrendo desembarcaron en Plymouth y no en New York tal como habían acordado con el gobierno de Londres. Aquellos pobres Pilgrims que llegaron en septiembre a Massachusetts y que pasaron el peor invierno de sus vidas debido a las duras condiciones climatológicas. Los 47 Pilgrims que quedaron fueron los primeros pobladores europeos de la zona y, con la ayuda de los Wannapog, la tribu local, aprendieron a cultivar, cazar y pescar para su supervivencia. Cuenta la leyenda (o la historia) que estos Pilgrims, agradecidos, después de su primera cosecha invitaron a las tribus de la zona y compartieron mesa y comida.
Si, Thanksgiving también es eso.
Pero lo más importante de Thanksgiving es la familia. La hija que viaja miles de millas para celebrar el Thanksgiving en casa de sus padres. La abuela que ayuda a su hija a preparar la cena. El tío, la tía y la sobrina que preparan unas verduras para acompañar el pavo. El padre que revolotea alrededor de su mujer para ser lo más útil posible. La madre que lo organiza todo para que la cena sea un festín familiar, en el que todo el mundo expresa su opinión, donde la candidez está servida y donde las bandejas cargadas de manjares pasan de una mano a otra para que, una vez llenos los platos, el pavo y sus acompañantes acaben en unas panzas llenas de júbilo. Júbilo por degustar un pavo que ha pasado unas cuantas horas en el horno. Pero júbilo sobretodo porqué se había reunido la familia alrededor de la mesa para celebrar... que son familia.
Si, Thanksgiving, sobretodo, es esto. Thanksgiving es familia.
Tengo una duda: ¿de verdad se sigue "dando las gracias" y celebrando lo que se tiene esa noche o ha pasado como con las Navidades, que la mayoría de la gente celebra comilonas y regalos y se olvida del pobre niño Jesús?
ResponderEliminarPor cierto, aprovecho para lanzar una idea si me lo permites... ¿un post sobre las tribus locales y su historia?
Ayer tuvimos la suerte de poder celebrar Thanksgiving con la familia de unos amigos. La família (padres, hijos, tios, sobrinos, abuelos,...) se reúne en una casa, come pavo acompañado de muchos condimentos y charla animadamente alrededor de la mesa. No hay regalos. Bueno, el regalo es encontrarse todos juntos, charlar y saber que se quieren. Fué fantástico.
EliminarMe apunto lo de las tribus;)
Pues sí, suena fantástico.
EliminarMe ha encantado tu descripción, me encanta la familia. Un besito.
ResponderEliminarAcabábamos de regresar a nuestra casa después de una cena fantástica con una familia americana. yo todavía estaba en las nubes, puesto que lo pasamos estupendamente. Creo sinceramente que Thanksgiving es familia, es encontrarse, reencontrarse y saberse unidos.
EliminarBesitos!
Es una celebración que siempre hace soñar ( cuando se las ve en las películas)
ResponderEliminarSe parece a nuestra cena navideña: la mesa puesta, el pavo esperando pacientemente a que lleguen todos los familiares, los abrazos de bienvenida, la felicidad del reencuentro, todos sentados a la mesa y, mientras las bandejas cargadas de comida pasan de mano en mano, la gente habla animadamente, comenta la veracidad o no del primer Thanksgiving y se lo pasa en grande. Ya después de la cena, todo el mundo a su casa, con la seguridad de tener una familia guay.
EliminarSi, a nosotros nos encantó
Hola! Yo llevo 3 años celebrando Thanksgiving con mi familia americana (una host family que tuve de adolescente y ellos son como mis padres, así que yo soy la "hija" que coge un vuelo para no perderme esto) y sí, tenemos la tradición de, antes de empezar a comer, decir unas palabras cada uno, dando las gracias por lo que cada cual considera importante. Es súper emotivo y sincero, y no tiene nada que ver con la religión, no es "bendecir la mesa", vamos! A mí me encanta!!! Un beso y Happy Thanksgiving atrasado!
ResponderEliminarHola! Si, para nosotros fue super emotivo. Unos amigos nos invitaron a casa de sus padres. Fue muy bonito. Había familiares que viajaron miles de millas para encontrarse en esta cena. El ambiente era festivo, había gente de todas las edades... si, nosotros estuvimos encantados de ser parte de esta bonita celebración.
EliminarIgualmente, happy Thanksgiving atrasado;)
Besos